I. Como forma de aprehender el mundo
Entender la improvisación como una herramienta que nace de la necesidad de expresar ideas sin pauta alguna para ser aplicada en cualquier actividad que requiera contacto con personas.
II. Como forma de apertura al otro
Fomentar la colaboración, el escuchar al compañero y el juego como piezas claves para desarrollar ambientes más creativos e innovadores.
III. Como forma de conocimiento de sí mismo
Aprender mediante diversas técnicas de improvisación a reaccionar y manejar emociones para enfrentar distintos escenarios que pueden presentarse en la vida.
Fomentar la perseverancia en la práctica y aprender a no forzar la perfección con el fin de aceptar el error como una oportunidad.