Lecturas de verano recomendadas por el Director del Instituto de Humanidades UDD para disfrutar durante estas vacaciones:

Recomienda a la Premio Nobel de Literatura 2013, la autora canadiense Alice Munro, con el título Demasiada Felicidad (Editorial Lumen). “Primero, porque te permite conocer a una Premio Nobel y, segundo, porque es una gran escritora que se interna con mucha sutileza en el alma femenina. Son una serie de retratos de mujeres, relatos breves, que reflejan muy bien la complejidad femenina”.

Otro autor que nos recomienda es el rumano Mircea Cartarescu, promisoria figura de la literatura europea, con el libro El Ruletista (Ediciones Impedimenta). “Es la historia de un hombre que juega a la ruleta rusa, un hombre que a diario se debate entre la vida y la muerte, que se dedica a apostar su vida cada noche. El vértigo que te produce el libro es realmente impresionante, y te hace reflexionar acerca de lo que puede ser el azar en la configuración del destino de una persona y si podemos controlarlo o no. Es un relato breve y fascinante”.

En cuanto a autores chilenos, sugiere las Obras Completas (Editorial Alfaguara) del porteño Carlos León (cuentista y ensayista). “Me parece un autor muy valioso que es necesario recuperar porque ha estado un poco abandonado”.

También dentro de la literatura chilena, el Director del Instituto de Humanidades UDD rescata a José Edwards con el libro Invitación al Desorden, recientemente editado por Editorial la Pollera. “Es un escritor mítico, que mezcla notablemente lo real con lo fantástico”.

Continuando en el país, Armando recomienda a quienes les gusta el género del ensayo acercarse a la reedición de La Belleza de Pensar (Editorial Universidad de Valparaíso) de Eduardo Anguita. “Es un libro muy interesante porque expone una reflexión muy potente de lo que es Chile y el modo de ser del chileno”.

Además, Armando se detiene un momento a recomendar la lectura de nuestros poetas: “Siempre es bueno leer poesía chilena, Chile tiene grandes poetas. Releer a Pablo Neruda, Vicente Huidobro y otros autores a los que uno siempre está volviendo y que son un verdadero privilegio”.

Antes de finalizar, Armando nos regala la siguiente reflexión: “Cada día soy más hedónico en la lectura y me hace mayor sentido lo que decía el poeta Borges respecto de que la lectura es una de las formas de la felicidad. Creo en lecturas que te provocan. Siempre un libro te deja algo y considero que lo que tiene que hacer el lector es privilegiar la literatura como un placer. Si un libro no te gusta, lo tienes que dejar y tomar otro. La lectura no puede ser una obligación”.

Y concluye: “Cuando uno elije libros para sus vacaciones tiene que pensar que se está llevando amigos, y la pregunta que debemos hacernos antes de escoger es ¿qué tema me gustaría conversar con ese amigo? Una vez que lo tenga resuelto, puedo buscar aquellos que toquen las temáticas que me interesan, que me provocan y me mueven”.