El lunes 7 de agosto se inició Casa Tomada, el ciclo de desayunos inspiradores organizado por el Instituto de Humanidades de la Universidad del Desarrollo. En la ocasión, participaron Juan Arabia, gran figura de la poesía latina americana contemporánea, acompañado de Eleonora Finkelstein y Daniel Calabrese, Directores de RiL editores, con los cuales se sigue fortaleciendo una alianza primordial en cuanto a ciertas publicaciones del Instituto de Humanidades.

Esta agradable reunión dio fruto a conversaciones y reflexiones muy interesantes en torno a la poesía, a la literatura y al espacio, cada vez más reducido, de las humanidades en el mundo de hoy. Se compartieron ideas, comparando estilos de grandes personalidades literatas, tanto latino americanos como europeos y se buscó identificar las razones de las diferencias observadas, así como el origen de la fuerte complejidad de las humanidades frente a las ciencias y de los cambios que ha generado, especialmente en la enseñanza de las mismas.

Si bien es cierto que, según el poeta argentino: “El humanístico perdió valor y poder”, Armando Roa, poeta y Director del Instituto de Humanidades manifiesta la necesidad de “captar y enamorar al público a través de la gran literatura”, lo cual Juan Arabia asegura ser posible, tomando como ejemplo una charla sobre el poeta francés Rimbaud que dio el viernes pasado y que encantó a la audiencia, generando muchas preguntas y debates.

A través de este intercambio de ideas, opiniones y anécdotas históricas, se gozó de un desayuno en un ambiente muy grato, que ocasionó tantas risas como profundas reflexiones. Se concluyó la reunión después de dos cautivadoras horas con una invitación a Juan Arabia, de parte de Armando Roa, a volver a la Universidad del Desarrollo y además, a publicar sus destacadas obras en la revista El Navigante (publicación del Instituto de Humanidades). En respuesta, el Director de la revista Buenos Aires Poetry, convidó a Armando Roa, en su calidad de poeta, a publicar algunas de sus obras de igual manera. Se cerró entonces el primer Casa Tomada del segundo semestre con mucho entusiasmo y con un perceptible anhelo de participar del próximo que se dará en septiembre.